Un podcast en dos partes analiza la historia ocultada de las importantes aportaciones bahá’ís a la educación, la gobernanza y la reforma social en el Irán del siglo XIX.

CENTRO MUNDIAL BAHÁ’Í — Un nuevo episodio de dos partes de Aprendizajes del terreno examina las aportaciones, en gran medida ignoradas, de la comunidad bahá’í al Irán de los siglos XIX y XX: desde los principios e ideas que influyeron en quienes pensaban en la reforma hasta el desarrollo de nuevos modelos de educación, gobernanza y vida social.
En la primera entrega, el doctor Moojan Momen analiza temas de su reciente trabajo «La revolución babí-bahá’í en Irán», publicado en la revista Estudios iraníes de la Universidad de Cambridge. Basándose en décadas de investigación, el doctor Momen cuestiona los relatos históricos convencionales que han marginado o ignorado las contribuciones de la comunidad bahá’í a la modernización de Irán durante un período crítico en el desarrollo de ese país.
«La comunidad bahá’í desempeñó un papel importante en la historia de Irán ―explica Momen en el podcast―. Especialmente en la última mitad del siglo XIX y la primera década del siglo XX, periodo en el que los reformistas reflexionaban sobre cómo modernizar Irán».
Momen analiza cómo la represión sistémica impidió que las aportaciones de la comunidad bahá’í se dieran a conocer públicamente a lo largo de sus 180 años de historia en Irán. Según él, este silencio dio lugar a una desinformación generalizada que influyó no solo en la población en general, sino también en los estudiosos, tanto en Irán como en Occidente.
El podcast analiza tres áreas claves en las que las enseñanzas bahá’ís contribuyeron al debate reformista: la gobernanza, la educación moderna y el avance de la mujer. En cada caso, Momen demuestra que las Figuras Centrales de la Fe bahá’í articularon ideas progresistas décadas antes que los reformadores sociales y que la comunidad bahá’í trabajó para implementar estos principios en su propia vida colectiva.
En cuanto a la gobernanza, por ejemplo, mientras que los reformadores iraníes de las décadas de 1860 y 1870 se limitaban a pedir al Shah que estableciera un gabinete de ministros, Bahá’u’lláh y ‘Abdu’l-Bahá abogaban por la monarquía constitucional y la democracia representativa, conceptos que eran innovadores incluso para la Europa de la época. La comunidad bahá’í instituyó gradualmente estos principios a través de consejos consultivos elegidos.
En materia de educación, Momen señala que las escuelas bahá’ís se establecieron no solo en las grandes ciudades, sino también en pueblos y aldeas pequeñas, lo que permitió a las poblaciones rurales acceder a la educación moderna. En particular, explica cómo las enseñanzas bahá’ís promovían que «la escuela para niñas tuviera prioridad sobre la escuela para niños», una postura radical en una sociedad en la que los dirigentes religiosos prohibían la educación de las mujeres.
Momen destaca otra distinción crucial: mientras que el debate reformista solo involucraba a «apenas algunos centenares» de personas concentradas en las principales ciudades, la comunidad bahá’í contaba con más de cien mil miembros y se extendía por pueblos y aldeas de todo Irán, lo que la hacía mucho más eficaz a la hora de comunicar nuevas ideas a la población en general.
La primera parte del podcast se centra en lo que el doctor Momen denomina «los hechos observables de la historia». La segunda parte tratará sobre la profunda transformación que se produjo bajo la superficie: cómo la primera comunidad bahá’í desarrolló nuevos patrones de vida colectiva que dieron lugar a lo que Momen describe como una contracultura distintiva, con implicaciones para la búsqueda por parte de la humanidad de formas de vida más justas y cooperativas.