AMÁN, Jordania — Cuando al comienzo de la pandemia la Oficina Bahá'í de Asuntos Exteriores de Jordania propició una serie de coloquios entre periodistas y agentes sociales sobre los medios de comunicación como fuerza de progreso, los participantes no imaginaron que a raíz de sus diálogos surgiría un nuevo programa de radio que proporcionaría un espacio público en el que analizar cómo llevar una vida coherente y ser una fuente de bien social.

La serie de programas, ya concluida y que duró ocho semanas en antena, fue producida por Radio Al‑Balad. en colaboración con la Oficina de Asuntos Externos.

«Hemos querido aportar esperanza y fe en un momento en que la crisis sanitaria mundial ha agudizado la presión psicológica», explica Taghreed Al-Doghmi, presentador de Radio Al‑Balad.

«El programa proporcionó a los oyentes de muy diversos orígenes la oportunidad de reflexionar sobre la armonía entre la dimensión espiritual y la material de la vida humana y de sentir que, por muy difíciles que sean las cosas en la actualidad, hay esperanza para el futuro».

El programa de radio, titulado «Cuerpo y alma», llegó a una amplia audiencia y tuvo una buena acogida, despertando conversaciones profundas entre los oyentes.

«Este programa nos ayuda a estudiar conceptos profundos y aspiraciones elevadas que apenas se tratan en la radio», dijo un oyente durante la sección de llamadas del programa.

«Tiene la capacidad de generar un espacio de conciencia social colectiva ―prosiguió― y nos ayuda a reflexionar sobre principios importantes para nuestras vidas, como el servicio al bien común, la justicia y la compasión».

Tahani Ruhi, de la Oficina de Asuntos Exteriores, atribuye el ambiente edificante y cautivador del programa de radio a las numerosas y profundas conversaciones entre los miembros de la Oficina y los periodistas que precedieron a las emisiones, así como a los fuertes lazos de amistad que se formaron entre ellos.

«Todos nos hicimos buenos amigos a lo largo del último año ―comenta―. Esto confirió al programa su espíritu de amistad y cordialidad. El programa fue un reflejo del proceso que lo generó».

Ruhi continúa explicando que los temas del programa se inspiraron en los que se habían tratado en anteriores coloquios, como el papel de la religión y los medios de comunicación para fomentar la esperanza; la superación de las divisiones y la promoción de la unión en las redes sociales; la importancia de la oración colectiva entre personas diversas para crear solidaridad; el concepto de altruismo a la hora de servir a la sociedad; el papel de los jóvenes en el servicio a sus comunidades durante la pandemia; y el lugar de las artes en la sociedad.

Dada la abrumadora respuesta positiva al programa, Radio Al‑Balad y la Oficina Bahá’í de Asuntos Externos están preparando ahora una nueva serie titulada «El ciclo de la vida», que analizará el propósito superior de la vida desde la infancia hasta la edad adulta.