CSW: El papel decisivo de las instituciones en la promoción de la igualdad de género
CIB NUEVA YORK — En el 68º periodo de sesiones de la Comisión sobre la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW por su sigla en inglés) de las Naciones Unidas, la Comunidad Internacional Bahá’í (CIB) subrayó el papel decisivo de las instituciones en el desmantelamiento de las barreras que impiden la plena participación de las mujeres en la sociedad. Sobre esta idea gira la reciente declaración (en inglés) de la CIB y se inspira en sus aportaciones de larga data a los debates mundiales sobre la igualdad de mujeres y hombres.
En un acto celebrado en el marco de la Comisión, Liliane Nkunzimana, representante de la Comunidad Internacional Bahá’í de la Oficina de Nueva York, compartió una experiencia de Zambia sobre la forma en la que las instituciones pueden fomentar la mejora social cuando se guían por el principio de la igualdad de mujeres y hombres.
En una comunidad local bahá’í, su Asamblea Espiritual adoptó un papel proactivo al organizar una reunión de unas ciento veinte mujeres de distintas confesiones religiosas, en colaboración con los jefes de la aldea, para analizar el progreso de las mujeres. Al asumir la responsabilidad de toda la organización logística, incluyendo la preparación de las comidas, los miembros varones de la Asamblea Local junto con otros hombres de la comunidad hicieron posible que las mujeres que sirven en la Asamblea y otras mujeres pudiesen participar plenamente; un nivel de apoyo descrito por muchos como un cambio extraordinario en el contexto histórico de su sociedad.
El resultado fue de gran calado: este acontecimiento dio lugar a proyectos como las clases de alfabetización para mujeres, el apoyo a los proyectos agrícolas locales y la creación de una caja de ahorros local para la generación de ingresos.
Daniel Perell, otro representante de la Oficina de Nueva York, profundizó sobre el principio de la igualdad, señalando que trasciende la mera paridad de estatus: «Se trata de dar forma, de manera colaborativa, a una nueva realidad, algo que aún tenemos que visualizar en su plenitud».
Durante la larga semana de sesiones de la Comisión, la Comunidad Internacional Bahá’í organizó ocho actos, que reunieron a más de 570 participantes. Entre ellos, se contó con representantes de los Estados miembros, agencias de las Naciones Unidas y organizaciones de la sociedad civil, lo que subraya el espíritu de colaboración y diálogo entre los diversos actores sociales.
La delegación de la Comunidad Internacional Bahá’í ante la Comisión, compuesta por Nkunzimana, Perell y más de dos docenas de delegadas, representaba un amplio abanico de experiencias de la comunidad mundial bahá’í. El grupo estaba integrado por miembros de las oficinas de la CIB de Addis Abeba, El Cairo, Ginebra y Nueva York, junto con miembros de las comunidades nacionales bahá’ís de Alemania, Australia, Bahrein, Brasil, Canadá, Emiratos Árabes Unidos, Estados Unidos, Omán, Reino Unido y Túnez.
Selección representativa de la participación de la CIB en la CSW68
A continuación se presenta una selección de imágenes con lo más destacado de la participación de la delegación de la Comunidad Internacional Bahá’í en debates de la Comisión, así como en otros actos relacionados organizados por la CIB.
Delegadas de la Comunidad Internacional Bahá’í ante la Comisión.
Las oficinas de la Comunidad Internacional Bahá’í en Nueva York y Ginebra organizaron conjuntamente un acto que enfatizó la campaña «Nuestra historia es una» y el poder de la acción individual y comunitaria para lograr el cambio.
La diputada Gathoni Wamuchomba, de Kenia, recalcó que el camino hacia la igualdad en todo el mundo trasciende la etnicidad y la religión. Destacó los aspectos universales de sus desafíos y subrayó la importancia del viaje colectivo hacia la igualdad.
Azza Karam, presidenta de Lead Integrity y antigua secretaria general de Religiones por la Paz, espresó la misma idea: «Nuestra historia es una y nuestra lucha también necesita ser solo una. Si hay una cosa que ha caracterizado los movimientos de mujeres en cualquier parte del mundo es que insistimos sistemáticamente en estar hombro con hombro porque las mujeres son mujeres en cualquier lugar».
Otra ponente, Kristina Arriaga, administradora del Consejo de Supervisión de Meta, declaró: «Todos nacemos con dignidad humana, independientemente del color de nuestra piel, de nuestro género o del país en el que hayamos nacido».
La Comunidad Internacional Bahá’í junto con la Oficina de la Consejera de la Presidencia del Gobierno de Kenia sobre los Derechos de las Mujeres, organizó un acto centrado en el fortalecimiento de las instituciones para el progreso de los derechos de las mujeres en África.
Los representantes de las comunidades bahá’ís de la región árabe convocaron una reunión con el título Empoderamiento a través de las instituciones: un enfoque colectivo de la igualdad de género.
Inspirándose en una metáfora de las enseñanzas bahá’ís, Wajeeha Al-Baharna, fundadora y vicepresidenta de la Asociación de Mujeres de Bahrein, declaró que «las mujeres y los hombres son como las alas de un pájaro, la sociedad no puede progresar sin la labor de ambos».
Un acto organizado por la Comunidad Internacional Bahá’í y las oficinas bahá’ís de Asuntos Externos de Australia y de Canadá, títulado Del conflicto a la colaboración: transformar las instituciones para promover la igualdad de género.
Con vistas a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, la Comunidad Internacional Bahá’í y Ifeyinwa Ofong, representante principal de WorldWIDE Network Nigeria ante las Naciones Unidas, organizaron conjuntamente un acto en el que las participantes debatieron sobre el papel de los individuos y de las instituciones a la hora de garantizar la igualdad de derechos de las mujeres sobre la propiedad, con especial atención a reducir la brecha entre la creación y la puesta en práctica de las leyes de herencia.
La Comunidad Internacional Bahá’í asistió a la audiencia del secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, con los representantes de la sociedad civil.
Un miembro de la delegación de la CIB de Túnez, Mohamed Ben Moussa (abajo derecha), en un acto organizado conjuntamente con Ética Empresarial para Crear el Futuro (EBBF por su sigla en inglés), una asociación de inspiración bahá’í que analiza la aplicación de los principios morales al mundo laboral y a la vida cotidiana.
La delegada de la Comunidad Internacional Bahá’í de Kenia, Atieno Mboya, en un acto de la asociación UK CSW para analizar la relación entre la pobreza, la riqueza y las normas económicas actuales, desde la perspectiva del hemisferio sur.
Las delegadas de la Comunidad Internacional Bahá’í asistieron al Foro de Juventud de la CSW68 en el que jóvenes de todo el mundo reflexionaron sobre cómo contribuir a la creación de sociedades igualitarias.
La representante de la Comunidad Internacional Bahá’í de la Oficina de Nueva York, Cecilia Schirmeister, en el acto «Voces jóvenes» en la Misión del Reino Unido ante la ONU».