CENTRO MUNDIAL BAHÁ'Í — Se ha retirado el encofrado que daba forma a la pérgola del Santuario de ‘Abdu’l-Bahá, sacando a la luz su estructura completada. El Santuario se yergue como símbolo del incesante servicio de ‘Abdu’l-Bahá en pos de la unificación de la humanidad.

El hormigón de la pérgola, vertido a finales de agosto en un intenso periodo de 19 horas, necesitaba tiempo para el «curado» antes de poder retirar el encofrado y los andamios. Con cada pieza de encofrado que se retiraba, se intensificaba la emoción que se vivía en el lugar, que culminó con una sorprendente demostración de abnegado esfuerzo y meticulosa planificación.

Con la plaza central y el edificio ahora totalmente despejados, el equipo ha procedido a reparar cualquier defecto que, como suele suceder, se haya producido en la superficie del hormigón al retirar el encofrado.

En declaraciones al Servicio de Noticias, Khosrow Rezai, director del proyecto, destacó el espíritu de colaboración y unidad del variopinto equipo que trabaja en el proyecto. «A lo largo de los últimos cuatro años de trabajo conjunto, la profunda dedicación del equipo para que esta estructura alcance su máxima perfección no ha hecho más que intensificarse».

En las siguientes imágenes se muestran los progresos realizados en el Santuario y en el terreno colindante.

Se retira el encofrado de poliestireno expandido (EPS) que daba forma al hormigón de la pérgola

Se retira el encofrado para dejar al descubierto la estructura de hormigón

Primero se retiran los andamios que sujetaban el encofrado y luego se retiran los propios encofrados para dejar al descubierto el hormigón

Los trabajadores limpian y retiran el EPS de la plaza central

Se retiran los andamios restantes, despejando la zona por primera vez desde que se completó la estructura de la pérgola

La luz del sol se filtra por los espacios abiertos de la pérgola

Ahora el equipo puede empezar a alisar y perfeccionar la superficie de hormigón, antes de revestirla de mármol

Vista contrapicada de la intrincada geometría de (la estructura de) la cubierta

Los trabajadores afinan las alteraciones en la superficie de hormigón, preparándola para las siguientes fases de trabajo

Se instalan barandillas alrededor de las aberturas para la seguridad de los trabajadores en la cubierta

Se aplica una capa exterior de hormigón a los pilares para conseguir una superficie lisa y uniforme

Se completa la limpieza final en la plaza central. Se coloca metal sobre las aberturas de la cubierta para impedir que entre la lluvia durante el invierno

Ahora que la zona central ha quedado totalmente despejada de encofrados y andamios de EPS, y que los muros se han lavado a presión para eliminar cualquier resto de escombros, el equipo puede iniciar la siguiente fase de preparación de la plaza central y de la pérgola, que se adornarán con mármol y cristal el año próximo.

Vista del edificio central desde la plaza norte, mirando hacia el sur

Mientras tanto, los trabajos han seguido avanzando en otras zonas del emplazamiento. En la berma occidental, se han colocado las tuberías de riego que suministrarán agua a los jardines y pronto se colocará la última capa de tierra en la parte superior de la berma.

En la berma oriental se ha colocado la mayor parte del encofrado de EPS y el equipo ha empezado a aplicar grava, alquitrán, malla y hormigón a la superficie de la berma. Este trabajo se completará más adelante, en primavera, cuando el tiempo sea más favorable.

El enlucido exterior del Centro de Visitantes de ‘Akká está casi terminado

En el interior del Centro de Visitantes se trabaja en la instalación de los sistemas mecánicos y eléctricos