MILÁN, Italia — Periodistas de más de 55 medios de comunicación de toda Italia asistieron a una rueda de prensa el jueves 16 en Milán para conocer los preparativos del mármol que revestirá el lado inferior de la pérgola, la plaza central del Santuario de ‘Abdu’l-Bahá y las ocho columnas del edificio principal.

«El diseño es una obra de arte. Esta estructura adquiere un significado de especial importancia, ya que es el mausoleo de ‘Abdu’l-Bahá», comentó Silvio Xompero, presidente de Margraf, la compañía italiana de mármoles que también extrajo y cinceló el mármol para la sede de la Casa Universal de Justicia, el edificio de los Archivos Internacionales Bahá’ís, las terrazas de los Jardines Bahá’ís de Haifa y las Casas de Adoración bahá’ís de la India y Samoa.

En cuanto a la relación entre la arquitectura y los lugares sagrados, Xompero describió además cómo la cúpula en forma de pérgola y los tragaluces están diseñados para evocar sentimientos espirituales. «Una vez terminado, cada persona que visite el Santuario podrá mirar hacia arriba desde el mausoleo de ‘Abdu’l-Bahá, contemplar el cielo y sentir la conexión entre el cielo y la tierra. Será maravilloso».

Entre los asistentes a la rueda de prensa se encontraban Hossein Amanat, elegido por la Casa Universal de Justicia como el arquitecto del proyecto; Sohrab Youssefian, enlace entre el proyecto y la empresa Margraf y los dos miembros de la Asamblea Espiritual Nacional de los Bahá’ís de Italia.

«Cada parte del Santuario, incluyendo las avenidas y las zonas de los jardines, se ha diseñado para propiciar la meditación», declaró Amanat.

Para describir el impacto del proyecto sobre los implicados en el trabajo de cantería, Amanat declaró: «La misma atmósfera de la fábrica parece distinta. Los trabajadores han llevado el proyecto como algo sagrado, trabajando con reverencia y dignidad».

Youssefian describió la naturaleza sagrada del proyecto: «El Santuario evoca el concepto de lo sagrado para cada visitante.

»Desde el final de la Segunda Guerra Mundial, la comunidad bahá’í ha mantenido una relación muy especial con Margraf. Siempre nos hemos entendido bien. Con su talento, han transformado el mármol en algo etéreo, digno de lo sagrado».

Alessandro Peotta, jefe de la Oficina Técnica de Margraf, se hizo eco de estos sentimientos: «Lo que en un tiempo fue el taller de un escultor se ha convertido en el taller de un artista».

Peotta comparó este proyecto con otros anteriores cuando la compañía tuvo que diseñar nuevas técnicas. «En el valle Chiampo, los recuerdos de la construcción de la sede de la Casa Universal de Justicia todavía generan asombro.

»Los habitantes del valle cuentan muchas historias sobre ese período tan especial. Al igual que hace 40 años se desarrollaron técnicas nuevas, hoy vuelve a ocurrir lo mismo».

La fabricación del mármol ha exigido el desarrollo de nueva maquinaria que pueda cortar la piedra directamente de modelos 3D con suma precisión, una exigencia del proyecto dadas las superficies curvadas de la cúpula en forma de pérgola.