Papúa Nueva Guinea: La Casa de Adoración comienza a tomar forma
PORT MORESBY, Papúa Nueva Guinea — Conforme nos aproximamos a la zona Waigani de Port Moresby (Papúa Nueva Guinea) se ve desde todas las direcciones la estructura emergente de la Casa de Adoración Bahá'í actualmente en construcción. Una vez terminada, la Casa de Adoración funcionará como un foco de oración y servicio a la sociedad, abierto a las personas de todos los orígenes.
Confucio Ikoirere, secretario de la Asamblea Espiritual Nacional bahá'í explica: «En Papúa Nueva Guinea, donde existen más de 800 idiomas y otras tantas tribus, la Casa de Adoración representa la unidad de todos los pueblos del país. El diseño del templo, que se basa en motivos de trenzado tradicionales, es en sí mismo un símbolo de unidad. Esta expresión artística se encuentra por doquier en todo el país, desde cestas creadas para ocasiones especiales o de uso cotidiano hasta esterillas realizadas para la familia y los amigos. El trenzado evoca la unión entre nuestros diversos orígenes y costumbres».
Tras completar los cimientos de la Casa de Adoración en diciembre pasado, se ha avanzado en la construcción de una intrincada estructura de acero para el edificio central que esboza el singular diseño de trenzado del exterior. Un diseño innovador de la cúpula de acero, ideado por Werkstudio, una empresa de ingeniería con sede en Alemania y Polonia, aporta la resistencia necesaria con un uso económico del material.
El sistema estructural interactúa con las nueve marquesinas de entrada que confieren solidez lateral al templo. Este sistema, del que algunas partes están a punto de ser completadas, sostendrá finalmente una cúpula de malla de acero que alcanzará en su ápice una altura aproximada de 16 metros sobre el nivel del suelo.
Se están realizando los últimos toques a los diseños de los paneles de madera que adornarán las entradas del templo, fabricados con maderas de la zona. Los jardines que circundarán el edificio central también se encuentran en proceso de planificación.
Ikoirere comenta: «La Casa de Adoración ofrecerá un entorno en el que las personas encontrarán consuelo y paz, podrán dedicar tiempo a su Creador y hallar inspiración para servir a la humanidad».