BOOKANAKERE, La India — Mientras siguen vigentes a nivel nacional las medidas de confinamiento para frenar la expansión del coronavirus, los bahá’ís de la India prosiguen sus actividades de ayuda y de aliento a sus conciudadanos. Una de ellas en la localidad de Bookanakere es un ejemplo de las innumerables iniciativas en marcha en todo el país, que sacan a la luz lo que se consigue cuando la gente combina sus modestos recursos en beneficio de todos.

«La promoción de la unidad ha sido siempre un principio rector en nuestra comunidad y es la base de todo lo que hacemos. Hemos comprobado el valor de trabajar unidos a la hora de superar las situaciones difíciles», comenta Kumar Nayak, de la Asamblea Espiritual Local de los Bahá’ís de Bookanakere.

Bookanakere es una de las numerosas zonas del país donde los asalariados y sus familias se han visto gravemente afectados debido al confinamiento. Preocupados por su bienestar, los bahá’ís de esta localidad colaboraron con las autoridades locales y otros residentes para suministrar alimentos y artículos de primera necesidad a unas cien familias.

La iniciativa contó con el apoyo de los miembros del Gram Panchayat (la autoridad local competente), que participaron en las visitas a las familias. Si bien el proyecto se llevó a cabo sin publicidad, las actividades fueron recogidas por un canal de noticias de televisión con cobertura estatal en Karnataka, en una emisión reciente: «Durante este tiempo, las personas con más medios han comprado en los comercios lo necesario para su sustento, pero muchas familias de trabajadores se enfrentan a graves privaciones.

» En esta situación, los miembros de la Asamblea Espiritual Local de los Bahá’ís y otros residentes de Bookanakere se han ofrecido para ayudar [...] a las familias en dificultad con la distribución de paquetes de alimentos».

Santos Kumar, otro miembro de la Asamblea Espiritual Local, reflexionando sobre la actividad comenta: «Cada uno de nosotros es responsable de contribuir al bienestar de todos. Cuando planteamos acciones para ayudarnos unos a otros, ello promueve la acción colectiva y crea un ambiente en el que todos se ven animados a contribuir. Vemos cómo muchos grupos de personas en el pueblo se ofrecen para solventar la crisis a su modo».