RDC: La primera Casa de Adoración nacional abre sus puertas
KINSHASA, República Democrática Del Congo — Más de 2000 personas de todo el territorio de la República Democrática del Congo (RDC), entre ellos algunos invitados de otros países, se reunieron en Kinshasa para la ceremonia de consagración de la primera Casa de Adoración bahá’í nacional del mundo bahá’í.
El programa incorporó una alocución de Mélanie Bangala, miembro del Cuerpo Continental de Consejeros en África, a quien la Casa Universal de Justicia había nombrado como representante para la ocasión. Bangala leyó una carta de la Casa de Justicia dirigida a la reunión que rezaba así: «La Casa de Adoración erigida en esta metrópolis congoleña se dedica así a unir la adoración a Dios y el servicio a la humanidad, fundamentales ambos para la regeneración del mundo».
En la carta también se declaraba: «Que esta su primera Casa de Adoración sea un faro de luz. Que sus muros resuenen con las melodías de las Palabras de Dios; que inspire acciones que nazcan de la verdadera fe; que ofrezca paz y tranquilidad a cada alma que entre en ella; y que proyecte la luz de la felicidad universal en toda la ciudad de Kinshasa y en la nación entera de la República Democrática del Congo».
La ceremonia, que prosiguió al día siguiente, reunió a representantes gubernamentales, jefes tradicionales, dirigentes religiosos y miembros de las instituciones bahá’ís así como a muchas otras personas de todo el vasto país.
En su discurso inaugural, Lavoisier Mutombo Tshiongo, secretario de la Asamblea Espiritual Nacional de los Bahá’ís de la RDC, describió la reunión como una expresión del «principio de unidad en diversidad, con presencia de diferentes pueblos, grupos étnicos y tribus».
Justin Kamwanya, otro miembro de la Asamblea Nacional, manifestó en el programa: «La Casa de Adoración no puede considerarse como un edificio corriente o como otro lugar de adoración más como los que nos son familiares. Es un lugar especial, con una gran carga de potencialidades espirituales.
«Como lugar desde el que se irradian fuerzas espirituales, la Casa de Adoración representa la expresión de una voluntad común y un ardiente deseo de servir a la humanidad».
El acto incorporó algunas actuaciones corales de distintas regiones de la RDC, cuyos integrantes habían ensayado durante más de tres meses para preparar esta ocasión tan especial. Durante el programa de oraciones en el interior del templo, las palabras de Bahá’u’lláh, cantadas tanto en lingala como en francés, resonaron solemnemente: «Posee un corazón puro, bondadoso y radiante, para que sea tuya una soberanía antigua, imperecedera y perdurable».
Nkulu Tomene Tutu, otro miembro de la Asamblea Nacional, compartió una reflexión sobre el acto y sobre el futuro del templo: «En nuestro país existen más de 450 grupos étnicos y este es un lugar en el que pueden reunirse abrazando la belleza de su diversidad y de su humanidad común».
Madeleine Lutchaka Fundi, residente y participante en la ceremonia, se hizo eco de este sentimiento: «El templo es un centro destinado a conectar los corazones con su creador».
«El alma no tiene género, el alma no tiene tribu, el alma no tiene edad, el alma no tiene estatus social. Es para todos. Esta es la característica esencial de esta estructura: la universalidad. Creemos que iluminará al mundo. De hecho, es un faro que disipa la oscuridad de todos estos prejuicios».
Un videorreportage con el título Una respuesta impresionante: El nacimiento de la Fe bahá’í en la República Democrática del Congo (inglés, francés) se proyectó durante la ceremonia, en la que se muestran historias sobre el viaje de los bahá’ís del país en sus empeños por contribuir al progreso material y espiritual de su sociedad. El documental se puede visionar aquí en inglés y francés.
A continuación se muestran algunos detalles de la histórica ceremonia de consagración de la primera Casa de Adoración nacional del mundo bahá’í.
Personas de todo el territorio de la RDC, que se trasladaron de lejos y de cerca, en el momento de su llegada al templo para el comienzo de la ceremonia de consagración.
Imágenes del templo y de los jardines que lo rodean.
La ceremonia contó con oraciones y citas cantadas por varios coros de diferentes regiones de la RDC.
A la reunión asistieron representantes gubernamentales, jefes tradicionales y dirigentes religiosos.
Un grupo de mujeres interpreta una canción de bienvenida a los invitados a la ceremonia de inauguración.
En el programa se incluyeron bailes tradicionales y otras presentaciones artísticas.
Los participantes acceden a la Casa de Adoración para el programa espiritual que incorporaba oraciones y la lectura de un mensaje de la Casa Universal de Justicia dirigido a los reunidos.
Bangala da lectura a la carta de la Casa de Justicia dirigida a los asistentes.
Un coro entona una oración musicada durante el programa religioso en el interior del edificio central.
En el programa se incluyó un período espiritual en el interior del templo.
Los participantes salen del templo tras el período espiritual.
El símbolo sagrado bahá’í conocido como el Más Grande Nombre se ha colocado en el ápice de la cúpula del templo. El Más Grande Nombre consiste en una representación caligráfica de la invocación «Oh Gloria del Más Glorioso».
Algunos miembros del equipo del templo.
Vista de una de las nueve entradas al templo.
Vista nocturna del templo.