La celebración lleva a los participantes de viaje por la vida y enseñanzas de Bahá'u'lláh
KUALA LUMPUR, Malasia — La Comunidad Bahá'í de Malasia dio la bienvenida a más de 300 invitados a una exposición creativa sobre la vida y las enseñanzas de Bahá'u'lláh. Celebrado en las afueras de Kuala Lumpur los días 24 y 25 de febrero de 2018, el evento conmemoró el bicentenario del nacimiento de Bahá'u'lláh y dio la bienvenida a los miembros del Parlamento de Malasia, al arzobispo de Kuala Lumpur, a otros líderes religiosos y a miembros notables de organizaciones de la sociedad civil y agencias gubernamentales.
Los invitados fueron guiados a través de una serie de zonas temáticas que seguía la historia de la Fe bahá'í y exploraba sus principios centrales. El flujo de ideas en la exposición se inspiró en el mensaje de la Casa Universal de Justicia escrito para el bicentenario en octubre de 2017.
El Sr. Datuk Lok Yim Pheng, uno de los comisarios de la Comisión de Derechos Humanos de Malasia, comentó cómo los esfuerzos de la comunidad bahá'í para construir comunidades a nivel local fueron expresiones tangibles del principio de la unicidad de la humanidad.
Señaló que esta era la primera vez que había visto el concepto de la unicidad de la humanidad presentado de una manera tan profunda.
Otro comisario de la Comisión de Derechos Humanos, el Sr. Jerald Joseph, compartió que los principios bahá'ís de la consulta y de la investigación independiente de la verdad fueron «puntos importantes que surgieron» del evento.
«Una filosofía tan brillante en el campo de la religión, – afirmó. Prosiguió comentando que– la Fe bahá'í enfatiza el sentido de la investigación», en contraste con un enfoque dogmático y doctrinario de la verdad. «Eso se vio a través del viaje presentado en la exposición», declaró el Sr. Joseph.
Las artes destacaron durante los dos días de la exposición, especialmente al resaltar cómo los principios espirituales tienen una expresión práctica para el mejoramiento social. En una de las presentaciones, dos voluntarios realizaron una breve representación teatral explicando cómo, cuando están en armonía, los individuos, las instituciones y las comunidades pueden generar un profundo cambio constructivo. En otro, se mostró un corto clip del documental Luz para el Mundo, seguido de algunos comentarios sobre la conexión inseparable entre la transformación individual y social.
La exposición provocó reflexiones atentas por parte de muchos de los invitados. El Sr. Thai Ming Yeow, miembro del Comité Ejecutivo del Consejo de la Juventud de Malasia, hizo hincapié en la importancia de promover un terreno común para el mejoramiento del mundo.
Muchos de los más de 300 visitantes también expresaron que estaban impresionados por el enfoque creativo de la exposición y por la forma en que los jóvenes desempeñaron un papel tan importante en el evento.
«En Malasia, con personas de diversos orígenes, descubrimos que las artes son un medio excelente para conectar corazones y tocar almas en culturas y etnias», afirmó Ho Yuet Mee, miembro de la Asamblea Espiritual Bahá'í de Malasia, al comentar sobre el ingenio y creatividad de los organizadores.
«La exposición fue un testimonio del poder de la unidad proclamado por Bahá'u'lláh», explicó Dylane Ho, representante de la comunidad bahá'í de Malasia. «Muchos han sentido profundamente la convicción de que la unidad de la humanidad es una realidad y no un mero ideal, no solo en las presentaciones sobre la vida de Bahá'u'lláh y la aplicación de Sus Enseñanzas, sino también en la atmósfera creada en el espacio mismo.
»Tantos corazones se han conectado a través de las fuerzas liberadas en este período bicentenario», continuó.