BAKÚ, Azerbaiyán — El Museo Nacional de Historia de Azerbaiyán celebró la educación de las mujeres, reconociendo las contribuciones de la heroína bahá'í Táhirih.

La historia de Táhirih, una heroína bahá'í de raíces azeríes, ha sido durante mucho tiempo un símbolo de inspiración en Azerbaiyán. Fue una de las principales defensoras de la igualdad entre mujeres y hombres en el siglo XIX.

El 25 de enero, el Museo Nacional de Historia de Azerbaiyán realizó una celebración de la educación de las mujeres en los siglos XIX y XX, en la que se reconoció la dedicación y las contribuciones de Táhirih al adelanto de la mujer.

«Táhirih es muy apreciada; no solo es conocida en la Fe bahá'í, sino también en todo Oriente», explicó Azer Jafarov, profesor de la Universidad Estatal de Bakú.

«Influyó en la literatura moderna, planteó el llamamiento a la emancipación de la mujer y tuvo un profundo impacto en la conciencia pública.

«El cumplimiento de la visión de Táhirih sobre la emancipación ha encontrado una mayor expresión a lo largo del tiempo —continuó el Dr. Jafarov—. Es la salida de un sol que trae la iluminación al corazón humano».

En la conferencia, Salahaddin Ayyubov, un representante de la comunidad bahá'í ha presentado un libro que acaba de publicarse sobre la vida y las obras de Táhirih. La presentación puso de relieve el impacto de Táhirih sobre el avance de la mujer. También se habló en el evento de sus contribuciones a la poesía, por la que es muy conocida.

«Táhirih es una gran personalidad a la que los escritores cristianos, ateos y musulmanes han rendido homenaje. Su visión de largo alcance de la realidad arroja luz sobre las aspiraciones de todos los que anhelan la paz y la armonía», afirmó Ali Farhadov, investigador del Museo Nacional de Historia de Azerbaiyán.

«Hoy en día, no solo las mujeres de Oriente, sino de todo el planeta deben inspirarse de su carácter y su vida, que es la encarnación de la libertad de pensamiento, la emancipación de la mujer y la actitud de búsqueda independiente de la verdad».

Se dice que una estatua en el centro de Bakú de una mujer quitándose el velo ha sido influenciada por la historia de Táhirih. El monumento, conocido como La estatua de una mujer liberada, fue realizado en 1960 por el escultor Fuad Abdurrahmanov.